German es educador social, tiene 58 años y ahora mismo está en el paro. Es voluntario, y acude varias veces a la semana al centro Amics ( Agencia de mediación para la integración y convivencia social) de Paterna, donde da clases de informática y español. Quedamos con él para que nos cuente su experiencia tratando con personas que proceden de culturas diferentes.
Germán lleva casi medio año dando clases de español sobre todo a mujeres, mayoritariamente marroquíes, pero también subsaharianas e indias. Para él es la primera experiencia como voluntario y nos cuenta que lo que se recibe a cambio es mucho. Cita a Paulo Freire, conocido pedagogo, al señalar que es muy importante para las personas expresarse y entender lo que se dice. De este modo pueden defender sus propios derechos. Las personas que acuden a sus clases tienen un grave problema con el idioma, por eso la actividad que más le llena es enseñar español.
Germán considera que lo más positivo de su labor es ofrecer la posibilidad a estas mujeres de relacionarse con otras personas, de abrirse a los demás y de sentirse comprendidas. Los momentos más gratificantes se producen cuando se da cuenta de que sus alumnas han aprendido algo: las mujeres se ponen a hablar entre ellas, se les nota animadas porque, por ejemplo, por fin han conseguido comprender un texto que se les resistía.
En el centro no sólo se reúnen personas inmigrantes. Hay otras actividades, como las clases de informática, a las que acude tanto gente autóctona como gente que procede de otros lugares. Eso favorece ampliar los horizontes personales de cada uno, porque ayuda a conocer mejor a los demás. Por las tardes hay clases de refuerzo escolar con niños, actividad que gestiona Save The Children.
Hablamos de la inmigración y la identidad con nuestro voluntario. Nos comenta que él considera a los inmigrantes como personas que quieren buscarse la vida, y luchan por un futuro mejor. Indica que la identidad es estar satisfecho con uno mismo, con dónde estás, y no ir a un sitio y saber que te van a cerrar las puertas por tener un color distinto, o por tener, como él mismo, más de cincuenta y cinco años.
Para finalizar la entrevista hemos hablado de la diversidad, y entonces Germán ha decidido preparar algo de comer: “Hablar de la diversidad es como una ensalada, cuando uno come una ensalada tiene maíz, lechuga, lo que a uno se le ocurra, y está buena la ensalada: eso es la diversidad… todos somos producto de la diversidad… somos todos una mezcla…y seguiremos siéndolo”
Nos despedimos de Germán. Nos ha mostrado cómo conocer a personas que proceden de otros lugares nos puede enriquecer. Gracias a su experiencia dando clases de español ha decidido dirigir su interés profesional hacia allí. Germán se está preparando el Dele (Diploma de Español como lengua extranjera) para poder dar clases de español a extranjeros. Espera conseguir una ocupación digna, trabajar con personas y ofrecerles las herramientas necesarias para que puedan expresarse. Con su ejemplo nos muestra cómo las circunstancias y los cambios en la vida se pueden convertir en oportunidades, para todos.
Patricia Taberner Vilar es Licenciada en Bellas Artes. Vall Ferrer Pellicer es trabajadora social y comunicadora. http://valencia.mediacrossproduction.com/portfolio/todos-somos-mezcla/
